
Hoy no estaba especialmente animado, la puta lluvia - bendición de agricultores y meteorólogos -, las diferencias de criterios con mí jefe y alguna faena indigerible por mi obsoleta manera de trabajar, intentando hacer bien las cosas, han sido demasiado para un solo día.
He llegado a casa y me he tumbado. Gracias a la amabilidad de Nestor, que me lo trajo de Angués, he comprado un libro - que ya tuve temporalmente - recomendación y encargó de Feliu, y que casi me leí en su estancia - la del libro - en mi casa. Como me pareció interesante y recomendable, lo he adquirido.
Como no tenía ganas de nada, me lo he leído de una tacada, con dos pares. Sus 236 páginas han sido un bálsamo necesario para un día poco afortunado. Y me ha gustado, especialmente la franqueza, sinceridad y falta de miramiento al expresar cosas poco correctas política y culturalmente hablando.
Luis Monreal no oculta ni su orientación, ni su vinculación, ni su fe. En estos tiempos de progresismo mal entendido, con mucho avanzado de pico, me viene a la cabeza el comentario de un amigo. Su novia, con la cual mantiene una relación hace un tiempo, tiene una madre - como casi todos los mortales - progre donde las haya; pues la señora no quiere ni oír hablar de la convivencia " en pecado" de su hijita de 34 años; ! dónde vamos a parar ¡. ¿ Qué debe esperar ?, ¿ qué se case por la iglesia ?, ¿ esperarará a que se haga monja ?.
Los fariseos, al lado de según que lenguas de este pais, son ursulinas. Ya lo expresa una frase castiza: " no te muerdas la lengua que igual te envenenas..."
( s / c )
Luis - que me perdone la familiaridad - opina igual que yo de esos pintores, también mal entendidos - a mí opinión - modernos, o de los x-ismos ( rellenese la x con lo que se le ocurra ). Cuenta una anécdota en su último capítulo - donde se explaya a conciencia - que no tiene desperdicio, al hablar sobre las opiniones de algunas pinturas modernas:
" Personas bien educadas y con inquietudes artísticas se refugian en su modestia para excusarse de que no les gusten estas y otras lindezas. Me dicen como compungidos:
- Lo que a mí me pasa es que no entiendo estas cosas.
Y yo contesto invariablemente:
- Estas cosas no tienen nada que entender, el error está en pretender entenderlas "
o esta otra pildorita:
" ...ciertos escritores, a la vista de las obras, descubren las intenciones más hondas del artista de las que este nunca ha sido consciente, sus pensamientos jamás formulados, los movimientos de su subconsciente y, en fin, su propio sistema estético que jamás se le había ocurrido. Cuando el artista, por la mañana, recibe el periódico y lee las cosas que dicen de él, se traga todo aquello que es puro caldo de cabeza y concluye: - Pues, efectivamente, soy un genio. ! "
Hay cosas que son claras y diáfanas, pero nos empeñamos en esta puta sociedad, en recubrirlas de un revoco decorativo, para normalizarlas y no transgredir las normas establecidas: " No es políticamente correcto " , " no podemos hablar de esto porque la sociedad es muy sensible ", " yo podría darte mi opinión, pero seguro que los periodistas la malinterpretarán...".
No sigo porque me exalto, y me conozco...
Resumiendo, un libro muy interesante, para personas con las cosas claras, y que tengan ganas de aprender algo sobre una parte de la historia reciente de este país. ( aquí he intentado explicar mi opinión sobre este pais, pero he fracasado...otro día será. De momento le deseo una buena salud )
Arte y guerra civil, Monreal Tejada, Luis, Editorial La Val de Onsera, Angués, 1999, 236 p.