miércoles, 13 de julio de 2011

El valle del Ara

El macizo del Vignemale siempre dominando el valle, majestuoso.

El valle del río Ara, en su nacimiento, es tranquilo. Los únicos visitantes son los solitarios -en su mayoría- personajes que recorren el GR11 o los que, como yo hace algunos años, hacen la vuelta circular al Vignemale -actividad que recomiendo efusivamente-.

Ibón inferior de Batans

Esta vez no fui a dar la vuelta a nada, ni a recorrer el GR11 -aunque lo siga-. Cada año intento ir a la montaña a disfrutar de ella; sin pensar en itinerarios, ni recorridos, ni plazos. Salir de un lugar para intentar llegar a otro -si se puede-. Subir a alguna cota -si se deja- y disfrutar de la belleza del monte. Lo que explica bastante la filosofía de estas salidas son los "capazos" que se pillan con algunos; hablando de su ruta, de la tuya, y de lo que sale. Es salir de casa a mirar, sin pensar, sin prisa.
También es importante salir sólo,...buscar el equilibrio,...el silencio. Es una forma de reencontrarte, equilibrarte y disfrutarte. No solemos disfrutar de nosotros mismos; de nuestros miedos, de los retos que supone estar solo. También es una experiencia interesante y nos permite -intentar- ser nosotros mismos.

Quería hacer un post con toda la salida -tengo bastante abandonado el blog- y he pensado en poner un adelanto...

El valle de Panticosa antes de los ibones azules (se ve la presa del primero).